Estas fiestas surgen de la ilusión, de podríamos decir un loco o un iluminado, que no sin muchos esfuerzos y dudas, supo prender la llama de la ilusión en todo un pueblo. Un pueblo que estos días celebra de nuevo “Las Guerras Cántabras”.
Estos días todo cambia y se transforma, el aspecto de nuestros balcones, los escaparates de nuestros negocios, incluso nuestras vestiduras y complementos sufren una metamorfosis, para trasladarnos a otra época.
Te puedes encontrar con el caudillo Corocotta, con el amado emperador Cesar Augusto, con la Diosa Cantabria, con el Druida Virón, la bellísima pitonisa Selenia o con el tan temido general Agripa. Puedes ver una boda Cantabra, vislumbrar el futuro junto a la Sacerdotisa Drusila Valeria, en el vuelo del Águila Real símbolo de Roma, o en las vísceras del cuervo sagrado del pueblo Cantabro, emocionarte y sentir orgullo de raza con la Insumisión. En fin vivir otra época, hacer un viaje al pasado, mezclarte con los festejos e insuflar el espíritu y la magia que flota en el ambiente.
Pero después de ver lo que podríamos describir como un museo vivo, repleto de actos de recreación historia, hay que reponer fuerzas, y disfrutar de los pinchos, tapas, y buen vino, con buena música Folk, y un ambiente creo que inolvidable.
¡¡¡¡CÁNTABROS!!!! ¡¡¡¡¡ROMANOS!!!!!! QUE EL MUNDO ENTERO, OIGA HABLAR DE ESTAS GUERRAS.
